*Amanece, Aitana se despierta en medio de un claro del bosque. A su alrededor decenas de personas que han pasado allí la noche también. Entumecida con el frio y la humedad, y dolorida por unos cuantos golpes considerables, saca de la mochila un pepito de ternera para reponer fuerzas y la cantimplora, antes de ponerse a pensar en lo sucedido*
Pensaba que había sido una horrible pesadilla pero no. Amigüitas, amigüitos...nos hemos perdido. No solo nos hemos perdido, no sé dónde esta Elena. La perdí anoche no sé cómo ni cuándo. He tratado de ir a buscarla, pero en medio de la noche y en las profundidades del bosque ha sido imposible, así que desistí, la última vez que intenté volver sobre mis pasos terminé rodando por un terraplen y cayendo a un charco de barro, me clavé una piedra en las costillas y solo espero no tener nada roto, porque salir de aquel hoyo para volver al claro del bosque fue un infierno.
Todo iba bien, empezamos de maravilla, animadas, riéndonos, cantando canciones mientras andabamos. Cada vez que llegábamos a algún punto de referencia lo anotaba en el mapa. Además, había gente por todos lados, por eso nos animamos a empezar la aventurilla por la noche y estrenar nuestras superlinternas de supervivencia. Por si es necesario que alguien salga a buscarnos, aquí dejo las anotaciones que hice en el mapa:
Tomamos, según mis notas, el camino del Este y por allí seguimos bastante rato. En un claro nos encontramos a un tío igualito que Gordi, el de los Goonies, pero con tatuajes, que estaba montando allí campamento. Nos hizo muchísima ilusión, pero como no nos podíamos aguantar la risa tonta, nosotras decidimos seguir.
Cambiamos de rumbo hacia el norte, todo bien, aunque nos encontramos un tipo un poco maltrecho, pero como estabamos aún cerca del "campamento base" pensamos que rápidamente vendrían a buscarle, no iban a dejar que a nadie le pasara nada ¿no?
Seguimos caminando, aunque ahora ya no de tan buen rollo, era dificil incluso volver sobre nuestros pasos, pero no se nos pasó por la cabeza parar. Pisándonos los talones había salido Sam, alias "El Boyes", bautizado así en el campamento base. Su sola presencia produce nauseas, escalofrios y dolor de cabeza, ¡Redioses que tio más grimoso!
Cambiamos de rumbo hacia el norte, todo bien, aunque nos encontramos un tipo un poco maltrecho, pero como estabamos aún cerca del "campamento base" pensamos que rápidamente vendrían a buscarle, no iban a dejar que a nadie le pasara nada ¿no?
Seguimos caminando, aunque ahora ya no de tan buen rollo, era dificil incluso volver sobre nuestros pasos, pero no se nos pasó por la cabeza parar. Pisándonos los talones había salido Sam, alias "El Boyes", bautizado así en el campamento base. Su sola presencia produce nauseas, escalofrios y dolor de cabeza, ¡Redioses que tio más grimoso!
La canción era más larga, pero Sam "El Boyes", solo nos interesaba como documento gráfico. Eso sí, si alguien lo ve, que le pregunte por nosotras, seguro que sabe donde mierdas estamos.
Huyendo de la incipiente compañía de este hombre perfecto, las cosas empezaron a torcerse, lo primero que se torció de hecho, fue un tobillo de Elena, que se metió un piñazo bastante plástico y no dejaba de decir "He oido algo ahí arriba, ¿lo has oido?", tenía un susto bastante gordo, entre la ostia y lo que fuera que se había oído; yo le dije que había sido un buho para tranquilizarla un poco, pero tampoco le hizo gracia la presencia de buhos mirándonos desde lo alto.
Seguimos haciendo zig - zag, primero dirección noreste y luego noroeste, era el único camino que parecía transitable y empezabamos a ponernos nerviosas. Yo intentaba que no se me notara para que Elena estuviera más tranquila, porque se había vuelto a piñar otra vez y además habíamos empezado a encontrar a gente rara y una tia loca que iba por ahí gritando que no debería haberse metido en los asuntos de los monos.
Y ya no se qué pasó, yo oía a Elena, pensaba que venía conmigo, pero cuando me dí la vuelta no la vi. La estuve llamando, pero tampoco era capaz de encontrar rastro de por dónde había venido, así que seguí al norte y fui a dar con el lugar donde estoy ahora, en el que por suerte hay mucha gente que decidió acampar y seguir por la mañana. El resto ya lo sabéis, he pasado aquí la noche; me encontré con un tipo que decía que sabía como llegar al otro lado, y que estábamos cerca. No se qué ha sido de él, no ha vuelto. Estoy más o menos bien, y seguro que Elena también lo está, así que tranquilos. En cuanto haya novedades os tendré informados.
-----------------------------------------------------------------------------------------------
Bien, estoy fuera, empecé a andar y de pronto...bueno, no se muy bien qué coño pasó, llamemoslo inspiración divina. El caso es que estoy fuera, he recobrado bastante las fuerzas y ahora solo falta Elena.
Huyendo de la incipiente compañía de este hombre perfecto, las cosas empezaron a torcerse, lo primero que se torció de hecho, fue un tobillo de Elena, que se metió un piñazo bastante plástico y no dejaba de decir "He oido algo ahí arriba, ¿lo has oido?", tenía un susto bastante gordo, entre la ostia y lo que fuera que se había oído; yo le dije que había sido un buho para tranquilizarla un poco, pero tampoco le hizo gracia la presencia de buhos mirándonos desde lo alto.
Seguimos haciendo zig - zag, primero dirección noreste y luego noroeste, era el único camino que parecía transitable y empezabamos a ponernos nerviosas. Yo intentaba que no se me notara para que Elena estuviera más tranquila, porque se había vuelto a piñar otra vez y además habíamos empezado a encontrar a gente rara y una tia loca que iba por ahí gritando que no debería haberse metido en los asuntos de los monos.
Y ya no se qué pasó, yo oía a Elena, pensaba que venía conmigo, pero cuando me dí la vuelta no la vi. La estuve llamando, pero tampoco era capaz de encontrar rastro de por dónde había venido, así que seguí al norte y fui a dar con el lugar donde estoy ahora, en el que por suerte hay mucha gente que decidió acampar y seguir por la mañana. El resto ya lo sabéis, he pasado aquí la noche; me encontré con un tipo que decía que sabía como llegar al otro lado, y que estábamos cerca. No se qué ha sido de él, no ha vuelto. Estoy más o menos bien, y seguro que Elena también lo está, así que tranquilos. En cuanto haya novedades os tendré informados.
-----------------------------------------------------------------------------------------------
Bien, estoy fuera, empecé a andar y de pronto...bueno, no se muy bien qué coño pasó, llamemoslo inspiración divina. El caso es que estoy fuera, he recobrado bastante las fuerzas y ahora solo falta Elena.
¿Cual sera el siguiente reto? xDDD
ResponderEliminarSois las ultimas supervivientes xD
Oh, gracias por preocuparte amor mio, yo también te quiero y he estado sin dormir porque no sabía si estabas bien XDD
ResponderEliminarSomos más duras que el pan congelao, que no se te olvide, no hay reto que se nos resista, así que el siguiente, que se ande con cuidao.
Muacks!